“Los
sistemas de información brindan grandes oportunidades para crear ventajas
competitivas, para cambiar la manera como una empresa compite, o para innovar
los procesos de una organización.”
INTRODUCCIÓN
La
realización de un Plan de Sistemas de Información dentro de cualquier
organización, tiene como finalidad asegurar la adecuación entre los objetivos
estratégicos de la misma y la información necesaria para soportar dichos grandes
objetivos. Esto hace que una metodología de planificación de sistemas abarque a
toda la organización y exige tener en cuenta una serie de conceptos, en cuanto a
planificación de estrategias, que desbordan el marco específico de una
metodología de desarrollo de sistemas.
Una
estrategia es un conjunto de decisiones que se toman con miras a lograr algo (un
objetivo). En el caso de una organización, una estrategia a largo plazo es lo
que permite lograr la visión de la organización en un futuro. Esta estrategia es
el resultado de una serie de decisiones sobre su alcance, competencias y manejo:
ü
El Alcance
del Negocio está asociado con decisiones que determinan dónde va a competir la
empresa, e implica contestar ¿qué productos o servicios va a producir?, ¿en qué
nichos?, ¿para qué clientes? y ¿en qué zonas geográficas?.
ü
Las
Competencias Distintivas implican que la organización tome decisiones acerca de
cómo la empresa va a competir para entregar sus productos o servicios. Para
ello, deben responderse preguntas como ¿Qué va a hacer que le compren a ella?
¿Qué la distingue de sus competidores? ¿Qué puede hacerse que sea difícil de
imitar por estos?.
ü
El decidir
sobre el Manejo del Negocio implica tomar decisiones acerca de la propiedad de
la empresa considerando, entre otros factores, la necesidad de establecer
alianzas o sociedades.
La manera de
competir de una empresa involucra habilidades, activos y rutinas que la
distinguen de los competidores y que deben ser aprovechadas en la definición de
la estrategia del negocio. Este concepto, al que también se ha denominado
"Competencias Centrales", constituye el conocimiento colectivo en la
organización necesario para coordinar habilidades, tecnologías y recursos en la
producción de bienes y servicios.
Una buena
identificación de cuáles serán las competencias centrales que habrán de
convertirse en las competencias distintivas de la estrategia, implica
seleccionar aquellas habilidades o prácticas que dan acceso potencial a una
amplia variedad de mercados, contribuyen en forma significativa al valor que
perciben los clientes y son difíciles de imitar por los competidores.
Los
elementos de la Infraestructura y Procesos Organizacionales de una empresa son
tres:
ü
La Estructura
Administrativa de la empresa, en donde se especifican los roles y
responsabilidades de los integrantes de la organización, así como los mecanismos
de autoridad y toma de decisiones.
ü
Los Procesos
de la organización, que pueden concebirse como flujos de coordinación para
satisfacer condiciones de compromiso entre las personas que integran a la
empresa.
ü
Las
Habilidades que habrán de tener los recursos humanos encargados de realizar los
procesos organizacionales.
Estos tres
componentes se encuentran íntimamente relacionados. Un ejemplo lo constituyen
aquellas organizaciones que han modificado su estructura administrativa de una
estructura meramente jerárquica dividida en unidades funcionales, a una de
equipos de procesos multifuncionales. Las personas que integran estos equipos
tienen una amplitud mayor en el alcance de sus tareas, por lo cual requieren la
habilidad de trabajar de manera autónoma.
Uno de los
objetivos de la adecuada aplicación de tecnología en la organización consiste en
obtener ventajas estratégicas que sean difíciles de imitar; es decir, en lograr
que la infraestructura y los procesos organizacionales (¿cómo? y ¿con qué?)
apoyen la estrategia (¿qué? ¿dónde? ¿por qué?) de la empresa. Estas ventajas
estratégicas se traducirán en ventajas competitivas hacia el exterior si ellas
contribuyen a dar mayor valor a los productos o servicios en relación a la
competencia. Usar tecnología para obtener ventajas estratégicas implica
instrumentar estrategias que refuercen los factores críticos de éxito (¿con
qué?) y las "competencias centrales" del negocio (¿cómo?).
Estrategia de
Tecnologías de Información
En forma
similar a la Estrategia del Negocio, la Estrategia de Tecnologías de Información
es el resultado de una serie de decisiones sobre su alcance, competencias y
manejo:
Un cuarto
componente de la estrategia de TI, la Infraestructura y Procesos de Tecnología,
tiene tres elementos interrelacionados:
ü
La
Arquitectura Tecnológica de la empresa, en donde se especifican las prioridades
y políticas que permiten la integración de aplicaciones tecnológicas, así como
los mecanismos de autoridad y toma de decisiones con relación a tecnología.
ü
Los Procesos
relacionados con el desarrollo de aplicaciones tecnológicas, con su
administración y con la operación de ellas.
ü
Las
Habilidades, es decir, las experiencias, competencias, compromisos, valores y
normas de la gente encargada de entregar productos y servicios de tecnología.
En forma
similar a la Infraestructura y Procesos de la Organización, este cuarto
componente se refiere a la manera como se instrumenta la Estrategia de TI en
actividades, equipos de trabajos, compromisos y demás elementos asociados con el
trabajo en la empresa. En este caso, los procesos son procesos asociados con las
TI, como podría ser el desarrollo de un nuevo sistema, la impresión de recibos
telefónicos, la evaluación de nuevas soluciones informáticas para la
organización, o la operación del centro de cómputo, entre otros. Es importante
caracterizar a la alineación de estrategias como el resultado de un ajuste
estratégico y de una integración funcional simultáneamente. El ajuste
estratégico se obtiene cuando se toman decisiones que posicionan adecuadamente a
la empresa en el mercado (o a las tecnologías en la Empresa). Un buen ajuste
estratégico permite capitalizar la estructura, procesos y habilidades de la
gente en la implementación de la estrategia organizacional (o de tecnología).
Por su
parte, la integración funcional representa la alineación entre los elementos
asociados directamente con el negocio, y aquéllos que tienen que ver con la
tecnología en sí. La integración Funcional es importante porque para cambiar las
estrategias de negocios pueden aprovecharse las oportunidades de las
tecnologías, y porque si las estrategias de negocios cambian, esto tendrá
impacto en la estrategia tecnológica. El descubrir oportunidades para innovar
los procesos de una empresa aprovechando las ventajas que brindan las
tecnologías de información, pone énfasis en la vinculación entre estrategias de
tecnología y de negocios (integración funcional), utilizando a las TI como un
facilitador para transformar la infraestructura y procesos del negocio.
Una
metodología que puede seguirse para instrumentar esta perspectiva consiste de
cinco pasos:
ü
Selección del
proceso a innovar, en función de los fines del negocio (definidos en la
estrategia de la organización).
ü
Identificación de los facilitadores para el cambio, donde se considera a las TI
y también a otros elementos culturales o estructurales que podrían ayudar a
innovar el proceso.
ü
Creación de
una visión del nuevo proceso, donde se definen objetivos y atributos para el
desempeño del proceso, y se hace un diseño del mismo.
ü
Diseño de
alternativas de implementación, donde se define la manera como habrá de
instrumentarse la visión generada en el paso anterior.
ü
Implementación del nuevo proceso, donde se instrumenta el nuevo proceso.
Lo
interesante de esta metodología es que los medios (TI entre otros) se consideran
antes de definir la visión del proceso (el cómo). De esta manera, se busca que
la visión sea lo más innovadora posible. El empleo de las tecnologías para la
instrumentación de nuevas estrategias de negocios requiere conocer las
fuerzas/debilidades de la infraestructura interna de tecnología y administrar el
riesgo tecnológico adecuadamente. A diferencia de la perspectiva anterior, la
innovación se da fundamentalmente en los procesos tecnológicos y no en los
procesos organizacionales.
Esta
perspectiva podría aplicarse, por ejemplo, cuando el área de TI cambia sus
mecanismos de entrega de productos informáticos hacia las áreas funcionales,
descentralizando actividades que anteriormente eran competencia únicamente del
área central de TI. En este caso, los procesos de informática se ven modificados
para permitir la instrumentación de nuevas estrategias de negocio. La entrega de
productos y servicios de tecnología en la organización, y su método de ajuste
asociado, es el que tiene que ver con la elaboración y ejecución de planes
tecnológicos. La administración estratégica se enfoca a decidir cómo responder a
las necesidades de los clientes, y el rol de la gerencia consiste en fijar
prioridades y en balancear los resultados a corto plazo con los de largo plazo.
Un error
común de los responsables de la función informática es tener planes de sistemas
demasiado amplios que pretenden cubrir todas las necesidades del negocio, desde
aquéllas verdaderamente importantes, hasta aquéllas que son deseables pero no
fundamentales; y como resultado, los esfuerzos se diseminan y no se obtienen los
objetivos planteados en un principio.
Para ponderar
entre sí los distintos proyectos informáticos, deben tomarse en cuenta los
beneficios económicos, los beneficios intangibles, los beneficios tecnológicos,
y la manera como un determinado proyecto apoya los objetivos de la
organización. En resumen, los pasos para la planificación estratégica de los
sistemas de información son:
ü
Identificar
metas, objetivos y estrategias.
ü
Examinar
tendencias tecnológicas y cómo pueden estas utilizarse para crear nuevas
oportunidades y ventajas competitivas.
ü
Determinar
los factores claves de éxito para la organización e identificarlos dentro del
organigrama de la empresa.
ü
Realizar
entrevistas a los ejecutivos claves para determinar: problemas, oportunidades y
necesidades de información.
ü
Desarrollar
un Modelo del Negocio, o sea la descripción breve de cada una de las actividades
de los procesos clave de la empresa.
ü
Identificar
los "requerimientos de información" de cada una de las actividades de los
procesos del Modelo. Al terminar este esfuerzo quedará claro qué información es
generada por cada actividad y qué información requiere para generarla. De esta
forma se obtiene la relación existente entre los procesos. Los "requerimientos
de información" no son datos sino una expresión coloquial en el lenguaje de los
conocedores del proceso, por ejemplo Pronóstico de demanda, Disponibilidad de
Servicios, Regulaciones, Costo operacional, etc.
ü
Crear una
"Arquitectura de Datos",o sea identificar las "entidades de datos" del negocio,
sus atributos, sus relaciones y su dominio. A esto se llama también "Modelo de
Datos" y a las relaciones entre las entidades "Modelo Entidad-Relación". Estos
modelos se logran en sesiones de "modelaje de datos" en que un facilitador busca
la colaboración de los expertos de cada aspecto del negocio para construir el
modelo.
ü
Establecer la
Arquitectura de Aplicaciones que agrupa requerimientos similares de
procesamiento de datos de los procesos en unidades de sistemas (teóricos) y las
Bases de Datos (también teóricas) para satisfacer los requerimientos de
información de la empresa.
En la siguiente figura se presenta, un bosquejo posible para un plan de sistemas
de información.
CONCLUSIONES
-
La realización de un Plan
de Sistemas de Información dentro de cualquier organización, tiene como
finalidad asegurar la adecuación entre los objetivos estratégicos de la misma
y la información necesaria para soportar dichos grandes objetivos.
-
El descubrir
oportunidades para innovar los procesos de una empresa aprovechando las
ventajas que brindan las tecnologías de información, pone énfasis en la
vinculación entre estrategias de tecnología y de negocios (integración
funcional), utilizando a las TI como un facilitador para transformar la
infraestructura y procesos del negocio.
-
El empleo de las
tecnologías de la información para la instrumentación de nuevas estrategias de
negocios requiere conocer las fuerzas/debilidades de la infraestructura
interna de tecnología y administrar el riesgo tecnológico adecuadamente.
BIBLIOGRAFÍA
-
Scott, George M;
"Principios de Sistemas de Información"; Editorial McGraw-Hill; 1995.
-
Davis, Gordon M y Olson,
Margrethe H; "Sistemas de Información Gerencial"; Editorial McGraw-Hill; 2°
Edición, 1994.
-
Gil
Pechuan, Ignacio; "Sistemas y Tecnologías de la Información para la Gestión";
Editorial McGraw-Hill; 1993.
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